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Boeing se encuentra al borde de detener la producción del modelo 737, enfrentándose a una reacción reglamentaria más rigurosa si persisten los problemas de producción. Steven Udvar-Hazy, presidente ejecutivo de Air Lease Corp, advirtió que otro problema significativo podría llevar a la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos a detener la producción del 737.

El ejecutivo hizo estas declaraciones durante la conferencia Airline Economics en Dublín, refiriéndose al incidente ocurrido con una puerta sellada en un 737 MAX 9 de Alaska Airlines. Según Udvar-Hazy, la FAA tomará medidas drásticas si se presentan más problemas de producción, destacando la importancia de que Boeing demuestre liderazgo en el diseño aeronáutico.

Aunque el incidente se relaciona con la planta de Renton, a las afueras de Seattle, donde se ensambló el avión, Udvar-Hazy minimizó la posibilidad de un problema sistémico. Sin embargo, destacó la necesidad de que Boeing aborde la cuestión crucial de la próxima generación de aviones y culpó a la junta directiva por no prestar suficiente atención a este aspecto.

Los investigadores están evaluando si la falta o mala colocación de pernos contribuyó al incidente del 5 de enero, que resultó en una inmovilización parcial del avión. La FAA tomó la decisión inusual de limitar la producción del Boeing 737 a los niveles actuales la semana pasada. Hasta el momento, ni la FAA ni Boeing han emitido comentarios sobre la situación.

Udvar-Hazy concluyó su intervención instando a Boeing a considerar la próxima generación de aviones y a demostrar un compromiso sólido con la mejora continua en términos de economía operativa.