Las recientes imágenes de los jugadores de tenis de mesa de Corea del Norte, Corea del Sur y China posando juntos para una selfie en el podio de medallas han generado un gran revuelo a nivel mundial, siendo vistas como un símbolo de rara armonía transfronteriza. En esta ocasión, Corea del Sur se llevó la medalla de bronce y Corea del Norte la de plata en la categoría de dobles mixtos, lo que llevó al surcoreano Lim Jong-hoon a celebrar el momento con una fotografía.

A lo largo de los años, ha habido momentos de cooperación entre las dos naciones en el ámbito deportivo. Por ejemplo, durante los Juegos Olímpicos de 2018, ambas Coreas desfilaron juntas en la ceremonia de apertura y formaron un equipo unificado en la competición femenina de hockey sobre hielo. Sin embargo, a pesar de las propuestas para un equipo unificado en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, esas iniciativas no prosperaron y las relaciones deportivas se deterioraron nuevamente.

En el contexto actual, las tensiones en la península de Corea han aumentado, especialmente debido al envío de globos cargados de basura desde Pyongyang hacia Corea del Sur, algunos de los cuales han aterrizado en áreas cercanas al complejo presidencial de Seúl. Es relevante recordar que Corea del Norte y Corea del Sur siguen técnicamente en guerra, ya que la Guerra de Corea concluyó en 1953 con un armisticio, sin que se firmara un tratado de paz definitivo.

Además, los Juegos Olímpicos han sido escenario de incidentes embarazosos, como el reciente error en la ceremonia de inauguración, donde 143 atletas surcoreanos fueron erróneamente identificados como norcoreanos. Este desliz fue objeto de disculpas por parte de los organizadores de los Juegos.

Con información de CNN.