Personal de la Comisión para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Copriseh) realizó inspecciones en las ferias de Tulancingo, enfocándose principalmente en los manejadores de alimentos. Durante las visitas, los inspectores emitieron observaciones y advertencias a los vendedores que no contaban con la indumentaria adecuada.

Por su parte, la alcaldía de Tulancingo informó que, antes de iniciar las celebraciones anuales, se llevaron a cabo capacitaciones para los prestadores de servicios. Estas capacitaciones incluyeron advertencias sobre las normas sanitarias necesarias para comercializar productos alimentarios.

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Hasta ahora, tanto la vigilancia estatal como municipal ha sido correctiva y no sancionadora. No se han decomisado mercancías, según un comunicado de la presidencia municipal de Tulancingo.

Jesús González, vendedor de antojitos mexicanos en la Feria de los Ángeles, comentó que tanto Copriseh como la alcaldía han supervisado su puesto y les han solicitado que usen guantes, cubre pelo, y que mantengan un lugar específico para la basura. Además, se requiere que una persona distinta a la que prepara los alimentos maneje el dinero.

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En cuanto a la Expo Feria de Tulancingo, Alondra Vásquez, quien vende brochetas y alitas, afirmó que no tienen problemas en cumplir las indicaciones de Copriseh. Sin embargo, destacó que la baja clientela ha generado pérdidas significativas, considerándolo el evento con mayores dificultades financieras hasta ahora.

A pesar de los desafíos, los vendedores deben cumplir con la normativa sanitaria para garantizar la salud de los consumidores y asegurar un ambiente seguro durante las festividades.

Con información de El Universal Hidalgo.