​La guerra entre Israel y Hamás en la Franja de Gaza ha generado una oleada de reacciones en países latinoamericanos, quienes han tomado medidas diplomáticas en respuesta a los acontecimientos. Mientras inicialmente la mayoría de los gobiernos de la región condenaron los ataques a Israel, ahora exigen a la nación judía que respete el derecho internacional humanitario y ponga fin a los bombardeos que han dejado más de 8,000 palestinos muertos.

El presidente de Chile, Gabriel Boric, condenó las operaciones militares israelíes, y acusó al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de violar abiertamente el derecho internacional, además anunció el envío de apoyo humanitario a Gaza.

Colombia, por otro lado, además de condenar los "ataques contra civiles" perpetrados por el ejército israelí, llamó a su embajadora en Tel Aviv, Margarita Manjarrez, para consultas, o lo que es lo mismo: una medida diplomática que expresa desacuerdo con la administración de un país y que suele anteceder al rompimiento de relaciones bilaterales.

Por otra parte el presidente Gustavo Petro expresó que si Israel no detiene la masacre del pueblo palestino, Colombia no puede mantener su representación en el país.

En un comunicado, la cancillería boliviana anunció la ruptura completa de la diplomacia con aquel país al tiempo que repudió la agresiva ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza y exigió el cese de los ataques y el levantamiento del bloqueo humanitario. Honduras también llamó a consultas a su embajador en Israel, Roberto Martínez, en rechazo a los bombardeos israelíes. Bolivia Rompe Relaciones Diplomáticas con Israel.

​